miércoles, 21 de diciembre de 2011

REGLAS DE LA PARTICIPACIÓN

1. LA WEB: ESPACIO PARA ACTUAR CON LIBERTAD:  Siebel, Thomas; House, Pat: "Cyber-Rules: Estrategias para el éxito en el E-Business".  Ediciones Granica S.A. España, 2000. Pag. 38.
2. LA WEB COMO LUGAR DE CONVERGENCIA:  Osuna Acedo, Sara; Busón Buesa, Carlos: "Convergencia de medios: La integración tecnológica en la era digital". Icaria Editorial. España, 2007. Pag. 93.
3. GLOCALIZACIÓN:  Colina, Carlos: "Mediaciones digitales y globalización: Reflexiones, lecturas y aportes". CEPFHE. Venezuela, 2003.Pag. 127



VENTAJAS E INCONVENIENTES DE LA PARTICIPACIÓN DE LA AUDIENCIA EN LOS PROGRAMAS DE RADIO

1. POSIBILIDAD DE EXPRESARSE:  Merayo Pérez, Arturo: "La radio en Iberoamérica: Evolución, diagnóstico y prospectiva". Comunicación Social ediciones y publicaciones. España, 2007. Pag. 412.
2. FAMILIARIDAD:  Portugal, Mario; Yudchak, Héctor: "Hacer radio. Guía integral". Galerna S.R.L. Argentina, 2008. Pag. 84.
3. HERENCIA DE EMISORAS COMUNITARIAS: Villamizar, Gustavo: "Comunicación, provincia e integración". Consejo de Publicaciones de la Universidad de los Andes. Venezuela, 2000. Pag. 55.

CÓMO PODRÍAN RESPONDER L0S MEDIOS

1. BLOGS CUBREN VACÍOS DE INFORMACIÓN:  Rojas, Octavio: "Blogs: la conversacion en Internet que está revolucionando medios, empresas y a ciudadanos"  ESIC Editorial. España, 2006Pag. 26
2. PERIODISMO PARTICIPATIVO: Hung, Elías: "Tic's, comunicación y periodismo digital". Ediciones Uninorte. Colombia, 2010. Pag. 157.
3. PROMOVER LA DISCUSIÓN:  Campos Freire, Francisco: "El nuevo escenario mediático". Comunicación Social ediciones y publicaciones. España, 2011. Pag. 240.

IMPLICACIONES PARA LOS MEDIOS Y EL PERIODISMO

1. CONEXIÓN MASIVA A LA INTERNET:  Colina, Carlos: "Mediaciones digitales y globalización: Reflexiones, lecturas y aportes" CEPFHE. Venezuela, 2003. Pag. 67
2.  PROMOCIÓN DE LOS WEBLOG: Rojas, Octavio; Alonso, Julio y otros: "Blogs: la conversación en Internet" ESIC Editorial. España, 2006. Pag. 39
3. RENOVACIÓN DE LA ENSEÑANZA UNIVERSITARIA: Campos Freire, Francisco: "El cambio mediático". Comunicación Social ediciones y publicaciones. España, 2010. Pag. 248

CONTEXTO CULTURAL: DETRÁS DE LA EXPLOSIÓN DE MEDIOS PARTICIPATIVOS


1. LA EVOLUCIÒN DEL INTERNET:  Piscitelli, Alejandro: Internet, la imprenta del siglo XXI. Editorial Gedisa. Barcelona, 2005. Pag. 6
2.  LA FUNCIÓN PARTICIPATIVA DE LA WEB:  Cebrián, Mariano: "Desarrollo del periodismo en Internet". Comunicación Social Ediciones y publicaciones. España, 2010. Pag. 275
3. GLOCALIZACIÓN: Colina, Carlos: "Mediaciones digitales y globalización: Reflexiones, lecturas y aportes". CEPFHE. Venezuela, 2003. Pag. 135

lunes, 14 de noviembre de 2011

FACTOR Y CRITERIO: UNA PROPUESTA DE LA RELACIÓN ENTRE EL CONTEXTO Y LAS ESTRUCTURAS RADIOFÓNICAS

RESUMEN
La gran oferta programática radial uno de los factores decisivos por el cual la competencia a nivel de estaciones radiales es sumamente intensa. Y en medio de esta competencia por captar audiencias, los productores recurren a la creatividad como anzuelo para cautivar público. Esto tiene implicaciones a nivel del estudio del medio radial. El presente documento es una argumentación que tiene por objetivo mostrar por qué el estudio del medio radiofónico debe realizarse desde un enfoque que considere el contexto total en el cual éste se desarrolla, considerando los aspectos ecónomicos, políticos y socio-culturales.
La radio es un medio complejo. Hablar de ella implica considerar muchas variables que, en la práctica, difícilmente se pueden equilibrar. La radio es un medio de interacción social. Pese al contexto mercantilista que en nuestros días enfrentan las empresas de medios de comunicación, la radio sigue siendo el medio que se percibe como el más cercano y el menos vertical de todos. También cabe agregar que es uno de los medios cuya institución es más accesible. Ésta es la razón por la cual las emisoras de radio han proliferado. Estas situaciones condicionan la estructura de los contenidos radiofónicos, como veremos a continuación.
Comencemos por ver la manera como, pese a considerarse un aspecto puramente académico, los diversos formatos radiofónicos se articulan con el contexto. El estudio de los formatos radiofónicos, llamados por varios autores “géneros”, se ha llevado a cabo basándose en la descripción de la estructura. Según lo menciona María del Pilar Martínez Costa y Susana Herrera Damas en su artículo “Los géneros radiofónicos en la teoría de la redacción periodística en España: Luces y sombras de los estudios realizados hasta la actualidad”, la discusión teórica en torno a los géneros en radio se ha limitado muchas veces a realizar una adaptación de los géneros informativos para la prensa sin considerar que la voz que enuncia el discurso, las propiedades de la comunicación oral, la fugacidad del mensaje y la presencia de elementos no lingüísticos –por mencionar sólo algunos– son rasgos que no encuentran una respuesta en dicha teoría, más próxima a la tradición impresa que a la tradición oral que, al fin de cuentas, constituye la base de la comunicación radiofónica (1). Este intento de adaptación, que constituye el inicio de los estudios en este campo de la comunicación social, ha ido siendo superado paulatinamente por los estudiosos abocados a la investigación del medio radial. Así, llegamos hasta Cebrián Herreros, Martí y Merayo Pérez que partiendo de un concepto de género radiofónico realizan sus respectivas propuestas tipológicas (2). Sin embargo, son las mismas autoras de este artículo quienes reconocen que “los autores se muestran conscientes de que resulta imposible atribuir un género a un único tipo de discurso: las fronteras aparecen difusas” (3). Y es que, como lo dice Carlos Araya en “Géneros, formatos y programas radiofónicos: Algunas reflexiones para su distinción”, casi todos los autores y autoras están de acuerdo en que los géneros no pueden ser químicamente puros y advierten que hay géneros híbridos (4). Y continua diciendo que “el objetivo primario es el entretenimiento y por lo tanto presenta hibridación” (5). Efectivamente, el medio radial busca entretener para captar audiencias. Los receptores de los mensajes radiales son objeto de investigación para definir sus gustos. Y esto se debe a que la radio, al igual que otros medios, experimenta hoy por hoy una priorización de su dimensión de empresa que les lleva a deberse a sus auspiciadores y a captar audiencia para ellos. Esta es una de las circunstancias más difíciles de equilibrar con la dimensión comunitaria de la radio. A esto hay que agregar que la radio es uno de los medios más accesibles en materia de instalación, y esto da pie a que se levanten muchas emisoras de radio, formales e informales, en búsqueda de dar sus respectivos enfoques a la sociedad. Muchas veces estas iniciativas son fruto del entusiasmo, sin un proyecto concreto a largo plazo, de manera que luego de un periodo más o menos largo se produce un decaimiento de la idea original de la radio, y cae finalmente en una lucha por sobrevivir. La proliferación de emisoras radiales hace que la competencia sea muy dura, de manera que la creatividad se vuelve el único recurso del que pueden echar mano para captar y mantener sus audiencias. Y en búsqueda de propuestas cada vez más originales, inusuales y llamativas, muchas veces se termina intensificando el proceso de hibridación que es, en sí, intrínseco al medio radiofónico. En conclusión, podemos decir que la realidad económica que enfrentan las radios van a influir en la estructuración de sus contenidos, esto es, en los géneros y formatos que propongan a sus audiencias, constituyéndose finalmente en un factor de hibridación.
Por otra parte, la radio se vuelve representativa para sus audiencias cuando acompaña de cerca los hechos y los transmite con fidelidad, buscando, antes que ser orientador de actitudes, ser el ágora de audiencias libres.
Tomemos como ejemplo el caso de radio La Luna, de Quito. Jamil Mahuad Witt, Presidente de Ecuador electo para gobernar durante el periodo de 1998 a 2002, fue protagonista de la crisis económica más grande que haya experimentado nunca el hermano país del norte, a fines de 1999. Fue derrocado a inicios del año 2000. Radio La Luna era, por aquel entonces, uno de las emisores de más firmes convicciones. De hecho, había nacido meses atrás, cuando Mahuad era Alcalde de Quito, y fue apadrinada por el entonces burgomaestre de la capital ecuatoriana. Al ascenso de Mahuad como Presidente, apoyó la firma de la paz con Perú, lo que le costó duras críticas por parte de sus audiencias, que en un espacio abierto llamado “Tribunas Ciudadanas”, los tildaban de “mahuadistas” y “peruanófilos” (6).
Velasco, autor de una hermosa crónica que retrata algunos detalles de los hechos acaecidos antes del derrocamiento de Mahuad Witt, menciona al inicio de ésta: “Un médico decía el otro día: ‘Los movimientos sociales’ seguramente se sienten identificados con La Luna, pero la audiencia de la radio no se siente representada por esos ‘movimientos sociales’ sino por la emisora misma” (7). Posteriormente, la crónica relata cómo radio La Luna se mantuvo junto a los hechos, sin doblegarse por los intentos de represión por parte de los militares y los políticos, antes apoyada por los grupos de nativos que tomaron el Palacio de Gobierno y el Congreso. En ese contexto, el espacio “Tribunas Ciudadanas” fue un espacio donde el pueblo participaba activamente, más aun, muchos querían hablar, animados por la presencia de un espacio que no ponía ningún tipo de censura a quienes quisieran expresarse en él. Tenemos en este caso una prueba del poder de la radio como medio de socialización y expresión, el cual no debe ser obviado, a riesgo de divorciarse de aquellos grupos a los que debe servir. Y para servir mejor a sus grupos de audiencias, el medio debe buscar las estructuras más adecuadas para transmitir sus contenidos. Es que precisamente, la diferencia más radical entre la radio y la prensa, aún con respecto a la televisión, es precisamente la capacidad de interacción que ofrece.
De lo anteriormente expuesto, se puede apreciar que las estructuras que adoptan los contenidos radiofónicos se ve frecuentemente – por no decir siempre – influida por el contexto en el que el medio se desenvuelve. Es, por tanto, viable considerar que en próximos estudios, la clasificación de los géneros y formatos radiofónicos contemplen un enfoque en el que el criterio de clasificación sean las condiciones contextuales.
NOTAS.
(1) y (3)  MARTÍNEZ COSTA, M. del Pilar y HERRERA DAMAS, Susana: “Los géneros radiofónicos en la teoría de la redacción periodística en España: Luces y sombras de los estudios realizados hasta la actualidad”: p. 116
(3)  MARTÍNEZ COSTA, M. del Pilar y HERRERA DAMAS, Susana: “Los géneros radiofónicos en la teoría de la redacción periodística en España: Luces y sombras de los estudios realizados hasta la actualidad”: p. 138
(4)  ARAYA RIVERA, Carlos: “Géneros, formatos y programas radiofónicos: Algunas reflexiones para su distinción”: p. 13
(5)  ARAYA RIVERA, Carlos: “Géneros, formatos y programas radiofónicos: Algunas reflexiones para su distinción”: p. 14
(6) y (7)  VELASCO, Paco: “La Luna: Una experiencia radial en la caída de Mahuad”.
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viernes, 16 de septiembre de 2011

GÉNEROS, PROGRAMAS FORMATOS RADIOFÓNICOS: ALGUNAS REFLEXIONES PARA SU DISTINCIÓN.

La programación de un medio radial tiene tres propósitos: seleccionar y ubicar los programas, diseñar las transiciones entre ellos y definir la imagen del medio. Sin embargo, existe una discusión acerca de cuál es la diferencia entre formato, programa y género, no habiéndose llegado aún a un acuerdo común.
En un inicio se denominaba formatos a los mensajes concretos. Mario Kaplún (1870) definió formato como la estructura más adecuada para transmitir contenidos. López Vigil y Haye formularon definiciones parecidas, aportando éste último que los géneros son procedimientos de predicación. Hasta entonces, la mayor dificultad para comprender la diferencia entre formato y género era definir la relación entre ambos. Tras los aportes de García Jiménez, Al-Ghassani, Polo Torres y Alberto Pérez se llegó a la siguiente conclusión: a) Géneros (formas específicas para organizar contenidos); b) Programas (formas o estructuras intermedias, constituidas por uno o más géneros); y c) Formatos (formas generales para organizar el conjunto de programas y géneros de una emisora).
Tras esta discusión sobrevendría otra: la referente a la clasificación de los géneros radiofónicos. Cabe mencionar que los géneros del periodismo radial muchas veces hacen referencias a los del periodismo escrito, ya que tienen su origen en éstos últimos. La primera tipología la daría Kaplún, que consideró doce formatos (géneros, según lo antes mencionado), reconociendo que no era conveniente atenerse a una clasificación rígida que podría resultar limitante. Ouro Alves formuló dos clasificaciones. En la primera consideró 12 formatos y los dividió en formatos cortos y largos, teniendo en cuenta la estructura. Luego, propuso muchos más formatos divididos en dos grupos: Menú Informativo y No tan informativo, incluyendo en este último las áreas de entretenimiento. Al-Ghassani acotó que la diferenciación de los géneros debía hacerse en base a la función y el objeto principalmente. Otras clasificaciones las  aportaron: García Jiménez (formativo, informativos y de entretenimiento), Cristina Romo Gil (periodísticos, de participación, dramáticos y didácticos), Vilar (referenciales, persuasivos y artísticos), Amelia del Caño  (narrativos, explicativos, argumentativos y descriptivos) y López Vigil (que considero tres criterios: el modo de producción, la intención de los productores y la segmentación de los destinatarios).
No obstante, los géneros no pueden ser puros, sino que tienden a mezclarse y dar origen a géneros nuevos o estilos de programa nuevos. Tras esta observación, Arayo Rivera propone una clasificación que considera dos grupo: Géneros Menores(dentro del cual hay dos subgrupos: informativos, interpretativos, de opinión y de discusión; y educativos, persuasivos y de entretenimiento.) y Géneros Mayores. Los géneros menores suelen requerir ser insertados dentro de un programa mayor.
Finalmente, es necesario conocer las características de la audiencia. Para ello, el autor propone elaborar el perfil del público de meta en tres dimensiones: geográfica, demográfica y psicográfica. Teniendo en cuenta dichos criterios, se puede dividir elk público en público de meta y público bienvenido.

FEMINICIDIO EN LA NOTA ROJA: ANÁLISIS DISCURSIVO CON PERSPECTIVA DE GÉNERO.

En la actualidad, el periodismo emplea un lenguaje sexista, que se caracteriza por ser “discriminatorio y fortalecedor de valores equívocos”. Con la finalidad de probar esta problemática y sugerir alternativas de solución, Yesika Cruz emplea un método llamado “análisis sintáctico” sobre algunas notas periodísticas policiales que ilustran esta situación.
Para su aplicación, describe las siguientes categorías conceptuales:
a)      El feminicidio es todo asesinato a mujeres motivado por el sentido de derecho y/o superioridad sobre ellas, por placer sádico y/o por la suposición de propiedad sobre las mujeres. De manera que se califica como tal los actos de violencia que, aun sin intención de provocar la muerte, son motivados por las razones descritas y la ocasionan de hecho.
b)      La perspectiva de género es una visión feminista crítica, analítica, explicativa, política y alternativa a lo que acontece en el orden de los géneros. Busca la equidad entre los géneros.
c)      El sexo es el conjunto de características biológicas que distinguen a hombres y mujeres.
d)     El género es el conjunto de diferencias sociales entre mujeres y hombres que han sido aprendidas, cambian con el tiempo y presentan grandes variaciones tanto entre diversas culturas como dentro de una misma cultura. Con el género se relaciona la “estrategia de naturalización”, que se da cuando una situación de creación social se asume como natural.
e)      Sexismo es el ejercicio discriminatorio por el cual se asignan roles fijos a las personas por el solo hecho de pertenecer a un determinado sexo, restringiendo su desarrollo pleno.
f)       Androcentrismo es la actitud sexista que lleva a considerar al sexo masculino como el centro y la medida de todas las cosas.
Los medios de comunicación, el lenguaje y la construcción de género están totalmente implicados, ya que la lengua refleja el sexismo existente y a transmitirse en los medios de comunicación, reafirma y naturaliza las diferencias sexistas.
Por otra parte, las categorías para realizar el análisis discursivo se clasifican según si ocultan, guardan silencio o excluyen a las mujeres (expresiones genéricas, el masculino plural para ambos géneros, términos con desinencias masculinas, uso no paralelo del género masculino para ambos géneros en oficos, cargos, profesiones y títulos); o bien si expresan desprecio, odio, consideran a las mujeres como subalternas o como sujetos de segunda categoría (estereotipos, imágenes asimétricas, uso asimétrico de tratamientos, protagonismo gramatical masculino y expresiones sensacionalistas).
Tras abordar diferentes muestras de notas policiales, se concluye en que existe sexismo y androcentrismo en el lenguaje periodístico, siendo necesario que los periodistas destierren desde el ámbito personal. Cambiar palabras, usar la transversalidad y el equilibrio en la información son opciones que pueden contribuir a un lenguaje más equitativo.

EL PERIODISTA TIENE QUE VERIFICAR Y VERIFICAR

En la actualidad, muchos países de América Latina se encuentran bajo circunstancias que no respetan la libertad de prensa ni garantizan seguridad a los periodistas. México, Colombia, Venezuela y Ecuador son algunos de ellos. Siendo el rol de la prensa controlar y vigilar el poder, así como denunciar lo que está mal y hacerse voz de los que no pueden imponerse al poder, muchos gobiernos consideran a los periodistas como enemigos, siendo los gobiernos autoritarios los más agresivos a la prensa.
En este contexto deben desenvolverse los periodistas. Sin embargo, es necesario seguir tres recomendaciones:
a)      Proteger la libertad de información, para lo cual es necesario recurrir a estrategias como informar junto con otros medios.
b)      Bajarse del propio ego, lo cual se refiere a que el periodista no debe trabajar solo, pretendiendo ganar prestigio, pues al hacerlo es más vulnerable a posibles ataques. Necesita trabajar y firmar a nombre de un medio.
c)      Desempeñar la labor periodística limpiamente, lo cual alude a no mentirle jamás a la fuente. Esto se vuelve de crucial importancia sobre todo cuando se trabaja en casos en los que los implicados son personajes peligrosos.
También es recomendable que se trate a los periodistas y se les capacite para manejar el estrés postraumático, típico tras vivir situaciones de riesgo extremo.
Asimismo, es fundamental que el periodista conozca  y sepa utilizar las técnicas básicas del periodismo, pues de ello depende la calidad ética de su trabajo. Esta técnicas son tres:
1.      La verificación de la información que se tiene, no descartando ninguna versión.
2.      Usar muchas fuentes y contrastar la información obtenida.
3.      Contar a los receptores de donde proviene la información.
Además, la autora menciona un procedimiento que considera la cuarta norma: la contextualización del hecho informado.
Por otra parte, sobre los nuevos tipos de censura que afectan al periodismo, considera tres: la censura brutal y directa (empleada muchas veces por el terrorismo), la económica (bloquear económicamente el medio mediante el retiro de la publicidad) y la autocensura por ignorancia del periodista (ocurre cuando se oculta información para evitar decir datos que se desconocen).
Por último, la situación económica del periodista de hoy es grave debido a la pobreza del salario, pero esto no debe ser determinante para la incursión en actos de corrupción. Como alternativas se propone la asociación de periodistas para montaje de nueva empresa.

EL TRABAJO DEL PERIODISTA DE RADIO.

El proceso de digitalización de la radio ha empezado y tiene perspectivas muy interesantes. Al hablar de la digitalización de la radio podemos referirnos a dos procesos: a) La digitalización de la emisión y la recepción y b) la transición, en el proceso de elaboración o producción radiofónica, de los procedimientos analógicos a los digitales.
Con respecto a este último punto, el inicio de la transición se dio con la introducción de los primeros ordenadores. A continuación, los teléfonos móviles y los nuevos formatos de grabación y almacenamiento de datos proveyeron a la radio de ventajas como una mayor agilidad para recuperar información, posibilidad de hacer cambios en la información, mayor conectividad, acceso a Internet, facilidad para hacer cálculos de tiempo, limpieza y legibilidad. En la actualidad, las nuevas herramientas exigen un cambio de los periodistas tradicionales, el cual es difícil y paulatino.
Entre los recursos que ofrece el mundo digital, el mayor invento es la Internet, considerada el mayor invento de los últimos cincuenta años. La Internet se ha convertido en el mayor competidor de las agencias de noticias, además de ser una herramienta utilísima en la búsqueda de información. Sin embargo, para el caso de la radio, no supera el obstáculo de la rapidez radial, siendo, no obstante, útil para formatos que admiten tiempo para tratamiento de datos.
De otro lado, los teléfonos móviles han otorgado la ventaja de la movilidad total y la inmediatez al periodista de radio, si bien aún no supera los problemas de cobertura, entre otros.
En cuanto a los sistemas de grabación, las tradicionales grabadoras de mano y las conectadas a un micrófono podrían ser sustituidas por otros recursos digitales, como los Mini-disc, que ofrecen una calidad de sonido superior a los recursos analógicos. Por el momento, los sistemas de grabación digitales deben mejorar su calidad, pero dada la facilidad que ofrece para manipular los contenidos, son propicios para el trabajo radial. Algunos recursos digitales para grabación son los Mini-discs y los DAT. Para el almacenamiento y organización de información son ideales el CD (Compact Disc) y el DVD (Digital Versatile Disc). Y también son sumamente prácticos para almacenar, organizar y administrar información los discos duros de los ordenadores.
Pero, tras estas ventajas, se presentan tres aspectos desfavorables para los empleados: 1) Reduce o congela las planillas, 2) exige reciclaje profesional y 3) demanda multifuncionalidad de los profesionales. Esto hace que el futuro de la radio sea incierto, sobre todo para quienes provienen del mundo analógico.

¿ES ESTO PERIODISMO, CIUDADANO?


 El periodismo ciudadano nació del afán del público de conformar la realidad, ante un periodismo clásico siempre apegado al poder político y económico, cuyos mayores errores fueron no profundizar mucho la información o no informar plenamente, alejando a la ciudadanía de la realidad .
El periodismo ciudadano es una manifestación de la conciencia ciudadana, que busca convertirse en emisor y hacedor de sus propias agendas. Se soporta en los adelantos tecnológicos y en nuevas actitudes sociológicas. El aumento de  la oferta de medios electrónicos y una mayor difusión de los ordenadores a su vez han dado origen a la cotidianización de medios y del ciber-espacio. Asimismo, frente a la crisis de credibilidad imperante en los medios de comunicación social, el periodismo ciudadano surge como una manera de satisfacer una necesidad psico-cultural al otorgar al ciudadano la posibilidad de emitir información , dándole mayor confianza y responsabilidad frente a la realidad que se le muestra en los medios. El medio electrónico a través del cual se hace efectivo este periodismo ciudadano son los blogs, cuya interactividad puede ser de vital importancia para el futuro de los medios de comunicación.
En cuanto a los contenidos informativos, estos suelen ser de temática muy variada, siendo los temas más recurrentes los de tecnología y los de demanda social. Esta variedad temática es un escape a la dictadura de la agenda mediática. Por otra parte, el soporte electrónico tiene la peculiaridad de hacer converger en sí la escritura con medios audiovisuales. En este contexto, la calidad de los contenidos también es muy variada, dependiendo si los que publican son profesionales o no. Pero, dado el personalismo que implica el periodismo ciudadano, para calificarse como tal, este debe enmarcarse en una de tres situaciones:
a)      Periodismo ciudadano que se publica libre e independientemente: Se ejerce sin intermediarios, con el fin de retomar el poder sobre la información. Carece de credibilidad si se publica anónimamente.
b)      Periodismo ciudadano enmarcado en un medio de comunicación: Puede presentarse de tres maneras: cuando un periodista profesional reconocido quiere recuperar su independencia intelectual, cuando se genera una empresa periodística on line o cuando se ejerce desde dentro del medio del en el que se trabaja.
c)      Periodismo ciudadano como estrategia publicitaria: Utiliza la confianza que genera el periodismo ciudadano para publicitarse. Recurre a la publicidad subliminal o actúa a través de blogs corporativos.
Finalmente, dado que el empleo de los blogs aumenta cada vez más, se puede predecir una saturación de blogs en la plataforma electrónica. Y por otro lado, hace falta un sistema más eficaz para la regulación de delitos informáticos.
En conclusión, el periodismo ciudadano es una práctica voluntaria, no necesariamente profesional, que busca recuperar el control sobre la información y se soporta tanto en el avance tecnológico como en una actitud de responsabilidad y participación social. Además, debido a su desorganizado avance, enfrenta nuevos problemas de credibilidad y subsistencia.

jueves, 19 de mayo de 2011

EL RETORNO DE AUDIENCIAS JÓVENES

Los jóvenes muestran preferencia por los medios de comunicación audiovisuales.

Se trata de las audiencias inclinadas al entretenimiento y la interacción descritas por Omar Rincón. La radio aparece desplazada por exigir participación activa de su audiencia mediante la imaginación y porque falta una auténtica apropiación social. Además, existe una tendencia a preferir la imagen frente a otros estímulos. Ya Eugenia Aguilar mencionaba que al no potenciar lecturas transversales, habría una inclinación a no trascender el campo denotativo.
                                                
Sin embargo, estos medios son percibidos como amenazantes, aun por los jóvenes.

Es posible el retorno de audiencias juveniles a la radio, pero esto exige la materialización de una nueva propuesta educativa y promover la apropiación social.